Bello venía a comer cada día a nuestra puerta, nos miraba con esos ojillos limpios de joven inmaculado y después se marchaba.
¡¡Ya ha sido adoptado!!
Nuestro Vaqui, de los INTOCABLES, les trajo a él y a su peluda familia de una cercana colonia. Le sorprendimos un día, cuando venía seguido por un montón de gatos que formaban una perfecta fila felina india detrás de él. Vaqui les mostró donde podían comer cada día y, de esta manera, pasar menos penurias e irse a dormir con la tripita llena.
Ya no pudimos mirar para otro lado y donde había una colonia de los INTOCABLES prácticamente controlada, nos encontramos con una prolongación que había que controlar.
Cogimos a Bello, Bestio, Algodón y Pimienta. Tres de ellos aún eran muy pequeños para castrar, pero Bello ya estaba en edad y así lo hicimos. Lo soltamos y, para nuestra sorpresa, acudió cada día a nuestra puerta pidiéndonos entrar con maullidos de lamento. Sí, sí, pidiendo que le abriéramos nuestra puerta… No lo pudimos evitar, le abrimos y lo cogimos a mano.
Bello es inicialmente tímido, hasta que las caricias le pueden, entonces se vuelve un saco de ronroneos.
Sólo necesita un hogar donde ser querido y, muy, muy importante, jugar con otros gatos. La relación que tiene entre Algodón, Pimienta y él es muy estrecha.
Se le cogió cuando sólo tenía 4 mesecitos y a ahora tendrá unos 9 preciosos meses en los que, cada día, nos va sorprendiendo la belleza en la que se va convirtiendo.
Será un gato muy especial cuando encuentre un hogar definitivo, en el que le den mucho calor humano.