Paola se encontraba en una colonia en peligro, habían llamado a una desratizadora para “eliminar” a los gatos que se refugiaban en una nave.
A la desesperada, fuimos a capturar a los que quedasen aún en las inmediaciones de la nave. Ella entró en la jaula rápidamente, estaba hambrienta y tan delgada, que no detectamos que estaba en estado avanzado de gestación.
Queremos darle una oportunidad de ser feliz en un hogar, en la calle, en lo que era su colonia, no tiene ningún futuro.
Paola es asustadiza, pero tremendamente buena y sumisa. Necesita de otros gatos para poder copiar comportamiento. Estamos seguros de que con paciencia y mucho amor, Paola llegará a ser una gata excepcionalmente buena y cariñosa.
Solo le espera encontrar un hogar.